En un sorpresivo giro de eventos, la sindica municipal Esther Mejía se encontró con una problemática situación al retomar su cargo después de una breve ausencia de 30 días. Durante este periodo, la síndica en funciones, Mireya Torres, despidió a más de 15 empleados de la oficina de la sindicatura, una acción que ha sido calificada por Mejía como un abuso de poder y una decisión incorrecta.
Esther Mejía había dejado temporalmente su puesto para participar en la campaña de proselitismo, con la intención de buscar la presidencia municipal. Durante su ausencia, Mireya Torres asumió las responsabilidades del cargo, aunque se esperaba que su gestión fuera breve y transitoria.
«Era nada más un mes el que iba a estar al frente de la sindicatura,» subrayó Mejía, visiblemente molesta por los despidos realizados por Torres. «Califico este acto como una acción incorrecta y un abuso de su posición.»
En respuesta a la situación, Mejía decidió revertir los despidos y reinstalar a cada uno de los 15 empleados en sus respectivos puestos. «Este es mi equipo de trabajo,» afirmó con firmeza. «No había ninguna justificación válida para estos despidos, especialmente considerando la naturaleza temporal del encargo de Torres.»
La decisión de Torres ha generado un clima de incertidumbre y descontento entre los empleados municipales, quienes ahora deben enfrentarse a la inseguridad laboral generada por este tipo de acciones abruptas y aparentemente injustificadas.
Esther Mejía ha asegurado que tomará las medidas necesarias para evitar que situaciones similares se repitan en el futuro, reafirmando su compromiso con la estabilidad y el respeto hacia los derechos laborales de su equipo.
La comunidad sigue atenta a los desarrollos de esta situación, mientras que se esperan respuestas oficiales por parte de Mireya Torres sobre las razones detrás de los despidos masivos en un periodo tan corto de tiempo.